No resulta fácil entender por qué tomamos ciertas decisiones de compra. ¿Por qué, por ejemplo, dos cosas que valgan lo mismo pueden resultar tan diferentes: una parece cara y la otra, baratísima? ¿O por qué cuando comparamos compras de alto valor a veces no nos importa pagar más, incluso en calidades similares?
Les propongo el siguiente juego, ud. debe eligir, no lea la solución hasta que termine el juego.
Si a la entrada del cine tuvieras que escoger entre dos cubos de palomitas de 7€ y 3 € ¿cual eligirias?
Ahora debes eligir entre uno de los tres: precios 7€, 6,50€ , 3€
Solución
1º Caso) Casi todo el mundo elige el pequeño por considerar que es la mitad que el grande y su precio es menor que la mitad del precio del grande.
2º Caso) Es curioso el efecto al pasar de ofrecer solo 2 opciones a 3. Casi todo el mundo elige el grande, el mediano no lo elige practicamente nadie, está ahí para que hagas una media entre los tres cubos (como elemento comparativo) y acabes eligiendo el cubo grande y así se incrementaría la venta de palomitas.
1 - 2º opción; 2 - la mediana.
ResponderEliminarSuele pasar con casi todo. Pasa igual con el ´99: eso que vale, por ejemplo 4´99, que en verdad son 5, pero de una forma compran más que de la otra, porque parece menos -visualmente-.
se nos hace creer que somos nosotros los que decidimos, cuando en realidad está todo pensado de antemano para que elijamos la opción que más les interesa. Así de sutil y retorcido es el sistema.
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